Origen del gobierno de Gabriel Boric: Acuerdos de paz de 2019
El gobierno de Gabriel Boric fue el resultado de los “acuerdos de paz” del 15 de noviembre del 2019. El objetivo del conjunto del sistema era ponerle un punto final a la Revuelta Popular del 18 de octubre y para eso pusieron en escena a un “izquierdista” disfrazado de “Allendista” que debía imponernos una versión un poco maquillada de la misma constitución de la Dictadura de 1980, manteniendo en pie todas las estructuras de la opresión y la brutal desigualdad vigente.
Continuidad de políticas de la derecha
Este gobierno “izquierdista”, apoyado por sectores de la izquierda oficial, se ha caracterizado por darle seguimiento a las políticas del derechista Sebastián Piñera, el responsable por la violenta represión de la Revuelta Popular.
El gobierno Boric no tuvo vergüenza en mantener como jefe de Carabineros, una de las policías más nazis en toda las Américas, al propio general Añez, el mismo jefe de Carabineros de Piñera.
La militarización en el Wallmapu aumentó.
Promesas incumplidas: amnistía y militarización
La prometida amnistía a los presos políticos fue transformada en una amnistía de apenas 11 presos políticos de la Revuelta y aún así, con autocríticas y arrepentimientos después de la presión de la derecha por haber amnistiado “criminales”, “terroristas” y “revoltosos”.
@GabrielBoric fue interpelado justo cuando iba a reunirse con @EmmanuelMacron Se le exigió la libertad de los presos políticos, poner fin a la militarización y justicia. ¡Y específicamente, la libertad de Nicolás Piña, "el ingeniero"!
— Comité Asamblea Constituyente Libre y Soberana (@asamblea_libre) July 21, 2023
¿Cuál fue su respuesta? ¡Nada! pic.twitter.com/xLtS7tAkDP
Este gobierno aceleró la entrega del cobre y otros recursos de Chile.
Después del Rechazo de 2022
El Rechazo de la “nueva” constitución de la Convención Constitucional en el 2022 empujó al gobierno Boric de manera integral a los brazos de la derecha, los testaferros de la Dictadura.
La razón de ser del gobierno Boric, que era imponernos la “nueva” constitución del sistema fracasó. Ahora quiere imponerla de la mano de Kast, sus Republicanos, los 12 Bordes, los 24 “Expertos” y de toda la derecha.
Los niveles de sumisión al sistema, que tiene como un componente central a la Embajada de los Estados Unidos, son increíbles.
Sumisión al sistema y apoyo a políticas exteriores controvertidas
Apoyo total al gobierno Biden en su política exterior, principalmente en relación a la guerra en Ucrania; sin la mínima disimulación ni siquiera sonrojarse. El régimen neofascista del gobierno de Zelensky agradece públicamente.
En su reciente visita a Francia, Boric destacó los cambios al acuerdo de asociación del 2003, entre Chile y la Unión Europea, que aumenta la entrega de los recursos de Chile a las principales potencias extranjeras.
Cuando habla de respeto a los Derechos Humanos, Boric se olvida de mirar la viga en su propios ojos, o de sus patrones del Norte, y la dirige a países que pueden también tener su propia viga, pero que han mantenido contradicciones con los Estados Unidos, como Nicaragua, Cuba y Venezuela.
Descontento popular y llamado a una Asamblea Constituyente Libre y Soberana.
Es evidente que el gobierno actual no representa los intereses de la enorme mayoría del pueblo chileno y si los intereses de las estructuras de la Dictadura; es un vocero de la Dictadura.
Por esas y varias otras razones, en diciembre, los chilenos deben Rechazar la “nueva” constitución.
La salida está en una Asamblea Constituyente Libre y Soberana, capaz de fundar un nuevo sistema para las amplias mayorías, lo que solo puede ser conseguido con el poder popular.