A los 49 años del asesinato de Miguel Humberto Enriquez Espinosa (5.10.1974), el principal dirigente del MIR (Movimiento de Izquierda Revolucionaria)
El nacimiento de los Cordones Industriales
En abril de 1972, se intenta organizar un Cabildo Abierto en Cerrillos,Región Metropolitana de Santiago, con demandas de pobladores y algunos dirigentes, incluyendo militantes del PS (Partido Socialista), MIR, JRR (Juventud Revolucionaria Radical), MAPU, y pobladores militantes del PC (Partido Comunista).
Aunque la clase obrera se integra, prevalece el elemento poblacional. La DC (Democracia Cristiana) intenta evitarlo, pero el Cabildo se realiza sin problemas, centrando debates en rechazar la Municipalidad y la necesidad de un “poder paralelo”. Sin embargo, este intento no prospera debido a la falta de organización de la clase trabajadora. El enfoque cambia, debido a la agudización de la lucha de clases, hacia la lucha obrera y su sector industrial vigoroso, que cuestiona la propiedad privada capitalista y busca resolver demandas de explotados y oprimidos.
La consigna principal era “La comuna en poder del pueblo”.
El Primer Cordón Industrial: Comando Coordinador de los trabajadores de Cerrillos- Maipú
En Maipú, una comuna industrial clave, nació el Comando Coordinador de trabajadores debido a la necesidad de coordinación en luchas por el traspaso al Área de Propiedad Social (APS) del gobierno de la UP (Unidad Popular), de empresas como Aluminios “El Mono”, Perlak y Polycron.
Maipú tenía alta concentración obrera, con más de 100 trabajadores por empresa y 46,000 trabajadores en 250 industrias, incluyendo textiles y metalúrgicas.
Habían acontecido 63 huelgas en los últimos meses, principalmente por demandas económicas.
Había 148 sindicatos urbanos en la comuna, y el 50% de las empresas tenían sindicatos. Ante la demora en resolver sus demandas, los trabajadores buscaron una política de clase propia para enfrentar a la patronal sin depender de políticos y partidos como la DC.
El Comando Coordinador de trabajadores en Maipú surge a raíz de una serie de huelgas y movilizaciones en diferentes empresas, como Aluminios “El Mono,” Indubal, CIC, Maestranzas Maipú, Perlak, y Polycron, todas exigiendo el traspaso al Área de Propiedad Social (APS). La unidad se forja en una reunión en Perlak, donde deciden tomar medidas para presionar al gobierno y exigir el traspaso al Área Social de varias empresas. Participan en esta iniciativa varias organizaciones sindicales y partidos políticos de izquierda.
El MIR participó por medio de su brazo sindical, el FTR (Frente de Trabajadores Revolucionarios).
Las luchas se intensifican, y los trabajadores de diferentes industrias se unen en la demanda de control obrero sobre la producción y la extensión del Área Social.
Se formaron barricadas y tomas de empresas de las cuales el MIR participa activamente. El gobierno promete intervenir algunas empresas, pero la burocracia judicial y la resistencia de la clase patronal dificultan su realización.
El Cordón Industrial Cerrillos-Maipú nace como resultado de estas luchas y se convierte en una poderosa organización que exige el traspaso al Área Social y cuestiona la propiedad privada capitalista. Sin embargo, la presencia de líderes políticos no obreros, como Carlos Altamirano del Partido Socialista, limitó su capacidad de enfrentar a la patronal y el gobierno de la UP (Unidad Popular).
A pesar de las dificultades y debilidades temporales, los Cordones Industriales representaron un paso hacia el control obrero y el cuestionamiento de la propiedad privada, marcando un período de creciente radicalización de la lucha de la clase trabajadora en Chile.
Por el control obrero
Durante el proceso de implementación del Área de Propiedad Social (APS) en las industrias de Chile, se comenzó a cuestionar la forma en que se llevaba a cabo la participación obrera en la administración de las empresas estatizadas. Los trabajadores se dieron cuenta de que la participación, tal como se estaba implementando, no satisfacía sus necesidades y demandas, y comenzaron a exigir una participación más activa y efectiva.
En el Encuentro Nacional Textil de las empresas del Área Social, que tuvo lugar en julio de 1972, los trabajadores expresaron diversas críticas al sistema de participación. Argumentaron que los “interventores” designados por el gobierno a menudo carecían de conexiones con las bases de la clase trabajadora y que esto generaba conflictos y tensiones.
Los trabajadores propusieron soluciones, como la rotación de los cargos de representación y la elección de interventores por las Asambleas de base. Además, enfatizaron la importancia de la información, la difusión y la toma en cuenta de las opiniones de las bases en la toma de decisiones.
Uno de los objetivos establecidos en ese encuentro fue permitir que las Asambleas de trabajadores tuvieran el derecho de criticar y revocar a los representantes del Estado que actuaban como interventores en las empresas. También se buscaba crear una Distribuidora Nacional Textil para abordar el problema del mercado negro y el desabastecimiento provocado por la patronal.
La producción textil en el Área Social experimentó un aumento significativo, lo que demostró la mayor eficiencia económica cuando los trabajadores dirigían la producción, priorizando las necesidades sociales sobre las ganancias capitalistas.
Estos eventos reflejan cómo los trabajadores chilenos estaban cada vez más conscientes de la importancia de tener un control real sobre las empresas y la producción.
Su lucha iba más allá de la mera participación formal y se centraba en garantizar que fueran ellos, como trabajadores, quienes toman decisiones importantes sobre la gestión y la dirección de las empresas.
Este proceso marcó un momento crucial en la historia laboral de Chile y en la búsqueda de un cambio en las relaciones de propiedad y producción en beneficio de la clase trabajadora y la sociedad en su conjunto.
La Huelga de los camioneros – octubre de 1972
El paro patronal de octubre de 1972 en Chile marcó un punto crucial en la historia del país, ya que desencadenó una serie de eventos y tensiones que llevaron a un fortalecimiento de los Cordones Industriales y a una creciente lucha de clases. La consecuencia fue el fortalecimiento de los Cordones Industriales y un aumento en la lucha de clases. Los trabajadores desafiaron la propiedad privada capitalista y buscaron un mayor control sobre la producción y la distribución de bienes y servicios.
Eventos clave:
1. Crisis Económica y Paro de Camioneros: Varias circunstancias, como la crisis económica de agosto, la escasez de repuestos y el control gubernamental de los precios, aumentaron las tensiones en la sociedad chilena. En este contexto, los dueños de camiones, con apoyo de Estados Unidos y sectores patronales, declararon un paro. La clase media comenzó a solidarizar con ese paro.
2. Respuesta del Gobierno de la UP: El gobierno de la Unidad Popular adoptó una postura de “controlar al enemigo” en lugar de aprovechar la crisis para “vencer al enemigo”. En lugar de impulsar los Cordones Industriales como una fuerza de la clase trabajadora, el gobierno pidió la intervención de las Fuerzas Armadas para defender al gobierno.
3. Intervención Militar en Empresas: El gobierno comenzó a nombrar militares en roles de interventores y administradores de empresas estatizadas. Esto generó preocupación, ya que los militares pertenecían a una institución burguesa y se pensaba que defenderían los intereses de la burguesía y la propiedad privada.
4. Fortalecimiento de los Cordones Industriales: Frente al paro patronal, los Cordones Industriales reaccionaron de manera diferente y se fortalecieron. Nuevos Cordones Industriales surgieron en todo Santiago y comenzaron a actuar como órganos de presión para que el gobierno cumpliera con las demandas de los trabajadores.
5. Huelgas y Toma de Empresas: Hubo una serie de huelgas y ocupaciones de empresas. Los trabajadores comenzaron a desafiar las reglas establecidas por el gobierno en la organización de la economía, aumentando la producción y distribución de productos básicos.
6. Nacimiento de Nuevos Cordones Industriales: Se formaron varios Cordones Industriales, como el Cordón Vicuña Mackenna, Cordón O’Higgins, Cordón Estación Central y Cordón Macul, entre otros. Al principio, estos cordones se centraron en presionar al gobierno, pero evolucionaron hacia una mayor participación política y de control obrero, en respuesta al paro patronal de los camioneros.
7. Estado de Emergencia y Movilización Obrera: El gobierno decretó el estado de emergencia en varias regiones, lo que generó una gran manifestación obrera en Santiago. Los trabajadores exigieron el traspaso inmediato al Área Social y la liberación de dirigentes encarcelados.
8. Intensificación del Conflicto: Se produjeron más huelgas y movilizaciones en diferentes sectores, incluyendo la industria y el sector de la construcción. La situación se volvió más radical y los patrones comenzaron a paralizar sus actividades en apoyo al paro. El MIR busca impulsar, aliado a otros sectores revolucionarios, principalmente a la izquierda del Partido Socialista, los Cordones Industriales como dualidad de poder, como base del poder popular, junto con los Comandos Comunales.
9. Protestas y Desafíos al Estado de Emergencia: A pesar de que las manifestaciones fueron declaradas ilegales durante el estado de emergencia, los trabajadores continuaron desafiando esta restricción y mostraron su fuerza en las calles.
10. Apoyo de la Democracia Cristiana (DC) al Paro: La DC, un partido patronal, apoyó activamente el paro patronal, lo que aumentó la organización y centralización de los patrones.
Los Cordones Industriales como organismos de tipo “soviético”
Los Cordones Industriales en Chile surgieron como una respuesta organizada de la clase trabajadora ante las condiciones económicas y políticas de la época. Estos organismos reflejaron la capacidad de autoorganización y la búsqueda de mayor control de los trabajadores sobre sus lugares de trabajo y la economía en general. La intervención de partidos políticos influyó en la dirección y estrategia de los Cordones, lo que tuvo un impacto en su desarrollo y en su papel en el proceso revolucionario chileno.
La capacidad de auto organización y lucha de la clase trabajadora en Chile tuvo en ese período su auge.
Cordón Industrial Vicuña Mackenna:
· Este Cordón nació como una coordinación de cerca de cuarenta sindicatos en respuesta al paro patronal de octubre de 1972. Su objetivo principal era defender las huelgas en las fábricas Elecmetal y Licores Mitjans.
· Después de que los trabajadores de Elecmetal tomaran la industria, fueron evacuados por Carabineros, lo que generó una respuesta solidaria del Cordón. Realizaron un paro de diez minutos en repudio a la acción de la policía y se concentraron en el frontis de la empresa. Ante la presión de los trabajadores, el gobierno se vio obligado a requisar la planta.
· La principal demanda de los trabajadores de este Cordón era que sus industrias fueran transferidas al Área Social. Vieron esta transferencia como una forma de liberarse de la explotación patronal y de tener una mayor autonomía en la organización del trabajo.
· El Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) tuvo una presencia activa en la coordinación de las industrias del Cordón. Presentaron un “Pliego del pueblo” que fue aceptado por los trabajadores. Este documento incluía puntos como no devolver las empresas requisadas, ampliar el Área Social, luchar por la participación real de los trabajadores en la dirección de las empresas del Estado, control obrero de las pequeñas y medianas industrias, y movilización permanente de los trabajadores en defensa de sus intereses.
· A pesar de la participación del MIR en la coordinación de los Cordones, hubo tensiones entre los Cordones y los Comandos Comunales, que también era una iniciativa respaldada por el MIR. Algunos dirigentes del MIR consideraban que los Cordones no eran estratégicos, debido a la influencia de la política del Partido Socialista y posteriormente del Partido Comunista, que buscaban ponerlo bajo el control del gobierno de la UP, y por eso favorecían la articulación de los Comandos Comunales.
· Los Cordones Industriales se formaron como una necesidad material y real de la clase trabajadora, y surgieron como resultado de la aplicación del método de autoorganización, la democracia directa y las asambleas. Los Cordones representaban la unidad solidaria de los trabajadores en sus lugares de trabajo y tenían delegados revocables.
· Los Cordones Industriales constituyen un ejemplo de cómo la clase trabajadora tiende hacia una planificación democrática de la economía y la sociabilización de los medios de producción. Los trabajadores buscaban organizarse para poner fin a la explotación y distribuir las ganancias de manera más equitativa.
· La intervención de partidos políticos en estos procesos fue significativa. El PS de Altamirano impulsó los Cordones como una táctica para fortalecer al gobierno de la UP, mientras que el MIR tenía una perspectiva diferente; a pesar de que en un primer momento no consideró que los Cordones eran la clave estratégica para la revolución socialista, después del Tanquetazo esa visión sufrió un importante cambio.
Cordón Estación Central:
· Este Cordón Industrial también se formó en respuesta al paro patronal de octubre de 1972. En ese momento, los trabajadores comenzaron a desbordar el marco político que había establecido el gobierno de la Unidad Popular (UP) y empezaron a centrarse más en asuntos específicos de industria en lugar de cuestiones generales.
· Los trabajadores en el Cordón Estación Central comenzaron a discutir y abordar problemas industriales específicos, lo que indica un cambio en la forma en que se planteaban las cuestiones dentro de la UP.
Cordón Cerrillos-Maipú:
· En este Cordón, los trabajadores se dieron cuenta de que los Comandos Comunales y las organizaciones poblacionales en la comuna no estaban logrando una articulación efectiva ni ganando fuerza. Vieron una debilidad en el área de distribución y decidieron intervenir en este sector.
· Se organizaron “ferias populares” desde el Cordón con la intención de acercar a los pobladores y ofrecer productos populares de alta calidad y bajo precio. Los trabajadores buscaron que otros sectores explotados y oprimidos se organizaran en torno a ellos para fortalecer su lucha conjunta.
· Hubo un descontento con la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) provincial, ya que su agenda no incluía la discusión sobre el paro patronal que afectaba la distribución. Los trabajadores del Cordón expresaron su desacuerdo con la postura de la CUT, que estaba dirigida en gran medida por el Partido Socialista (PS) y el Partido Comunista (PC), quienes estaban a favor de devolver las empresas a manos privadas.
· Los trabajadores del Cordón lograron influir en la agenda de la CUT provincial y forzaron la discusión de sus problemas reales, incluyendo cómo enfrentar la patronal que buscaba aplastar a los trabajadores.
Fuera de Santiago:
· En Concepción, surgió el Cordón Huachipato en respuesta al paro patronal. Los trabajadores tomaron varias industrias y exigieron su transferencia al Área Social. Algunas de las industrias involucradas incluyeron a Coca-Cola, CAP, Petroquímica, Petrodom, Cementos Bio Bio, Inchalam y Maestranzas Cerrillos, entre otras.
· Se realizaron piquetes para abrir tiendas cerradas, con la intervención de Merino, Secretario General Regional del PS.
· Se formaron un total de 100 Coordinaciones en Penco, Tomé, Talcahuano y Chiguayante en la misma región. Los Cordones se convirtieron en puntos de organización y concentración significativos para los trabajadores.
· Los Cordones no solo se centraron en asuntos laborales, sino que también comenzaron a atender las necesidades educativas y de salud de los trabajadores. Incluso establecieron escuelas dentro de las empresas en colaboración con la Universidad Técnica.
· La fuerza de los Cordones como órganos de poder obrero fue tan significativa que la CUT tuvo que aceptar su existencia y comenzó a apoyarse en ellos en lugar de verlos como órganos “paralelos”. La CUT formuló una declaración pública ante el paro patronal y dejó de rechazar a los Cordones, desarrollando una política para intentar cooptarlos.
· Estos eventos muestran cómo los Cordones Industriales se convirtieron en actores políticos significativos en el período previo al golpe militar en Chile, abordando cuestiones industriales y sociales, y desafiando la línea política establecida por la Unidad Popular y la CUT.
El reflujo temporal de los Cordones Industriales
El período posterior al paro patronal de octubre de 1972 marcó un reflujo de la clase obrera en Chile, pero representó un período crucial en la evolución política del país, ya que los trabajadores comenzaron a cuestionar el papel del gobierno y a considerar su propio poder y capacidad para dirigir la sociedad.
Las tensiones entre apoyar al gobierno y avanzar hacia una revolución socialista se volvieron más evidentes, y los Cordones Industriales jugaron un papel importante en este proceso de concienciación y debate dentro de la clase trabajadora.
Puntos clave:
1. Cuestionamiento al Gobierno de la UP: Después del paro patronal, los trabajadores comenzaron a cuestionar el papel del gobierno de la Unidad Popular (UP). A pesar de que éste todavía era visto como “el gobierno popular”, surgieron debates sobre la naturaleza del gobierno y la vía chilena hacia el socialismo. Los trabajadores estaban considerando si debían apoyar al gobierno o avanzar hacia una revolución socialista.
2. Conciencia de Poder Obrero: Algunos líderes sindicales, como Miguel Matta y Manuel Minami, expresaron la creciente conciencia de que los trabajadores tenían el poder en sus manos. Se mencionó que cuando los trabajadores tomaron las fábricas abandonadas por los patrones, estaban asumiendo el control y poniendo en marcha el país. Esto reflejaba la percepción de que los trabajadores podían desempeñar un papel fundamental en la dirección de la sociedad.
3. Contradicción entre Apoyar o Superar al Gobierno: La contradicción principal en ese momento radicaba en si apoyar al gobierno de la UP o superarlo en busca de una revolución socialista. Hubo una gran marcha el 4 de noviembre de 1972, en la que aproximadamente un millón de trabajadores salieron a las calles para respaldar al gobierno. Sin embargo, esta contradicción entre apoyar o superar al gobierno se intensificaría en los meses siguientes.
4. Reflujo en el Cordón Cerrillos-Maipú: A pesar de que el Cordón Cerrillos-Maipú era uno de los más politizados y organizados, experimentó un fuerte reflujo después del paro de octubre. Miguel Silva señaló que este reflujo se debió a la limitada capacidad del comando para abordar las cuestiones relacionadas con el poder popular. Los trabajadores estaban reflexionando sobre quién debería tener el poder y si el gobierno era la respuesta.
5. Requisición de Empresas: Hubo un conflicto con la Contraloría debido a la requisición de empresas como Fensa y Fantuzzi. La Contraloría rechazó inicialmente estas requisiciones, lo que generó tensiones. Para evitar un levantamiento de los trabajadores, el gobierno finalmente declaró el traspaso al Área Social de varias industrias.
6. Desalojos y Requisiciones: En noviembre de 1972, se emitieron órdenes de desalojo de empresas como Ferriloza y el Diario “El Sur”. Sin embargo, algunas de estas empresas fueron finalmente requisadas debido a la presión de los trabajadores y el temor a una posible revuelta.
El gobierno de la UP intenta controlar a los Cordones Industriales
Las tensiones entre el gobierno de la Unidad Popular (UP) y sectores de los trabajadores en Chile llevaron al fortalecimiento de los Cordones Industriales como órganos de poder local de la clase trabajadora.
Este período fue testigo de la creciente conciencia de la clase trabajadora en Chile, su capacidad para tomar el control de las empresas y su lucha por definir su papel en la sociedad. Las tensiones con el gobierno y las discrepancias en la estrategia política llevaron al fortalecimiento de los Cordones Industriales, como un factor importante en la lucha de clases y en la búsqueda de un cambio social profundo.
Puntos clave:
1. Política de “Devoluciones”: Después del paro patronal de octubre de 1972, hubo un intento de centralizar la toma del control de las industrias por parte de la CUT y el gobierno. Sin embargo, en lugar de avanzar hacia un mayor control obrero y fortalecer el poder de la clase trabajadora, el gobierno tomó medidas en contra de las tomas de fábrica. Esto generó descontento entre los trabajadores y llevó a manifestaciones y barricadas en Santiago.
2. Cambio de Gabinete Cívico-Militar: El gobierno de la UP anunció un nuevo gabinete cívico-militar en noviembre de 1972. La inclusión de militares en el gabinete generó preocupación entre algunos sectores, ya que las Fuerzas Armadas, históricamente habían defendido los intereses de la burguesía. Esto llevó a dudas sobre la verdadera naturaleza del gobierno y su relación con la clase trabajadora.
3. Intervenciones y Requisición de Empresas: El gobierno de la UP tenía un plan de nacionalización de 91 empresas estratégicas, pero los trabajadores superaron estas expectativas. Antes del paro patronal, ya se habían intervenido o requisado 167 empresas, y para diciembre de 1972, había 202 empresas intervenidas, con un gran número de trabajadores en su interior. Esto demostró la capacidad de la clase trabajadora para tomar el control de las empresas y cuestionar el plan gubernamental.
4. Poder de los Cordones Industriales: A medida que avanzaba el tiempo, los Cordones Industriales se fortalecieron como órganos embrionarios de doble poder en la sociedad. Los trabajadores estaban asumiendo un papel cada vez más central en la dirección de la producción y la economía.
5. Desafío a la Estrategia del Gobierno: Las tensiones entre el gobierno y los trabajadores reflejaron una profunda contradicción en la estrategia del gobierno, que buscaba colaborar con los patrones y las Fuerzas Armadas. Los trabajadores, por otro lado, estaban comprometidos en avanzar hacia una sociedad libre de explotación y opresión, es decir, hacia el socialismo.
6. Alianza con Otros Sectores Populares: Se menciona la necesidad de que la clase trabajadora, a través de los Cordones Industriales, se alíe con otros sectores populares, como los pobladores y los campesinos, para luchar contra la burguesía en una alianza revolucionaria. Esto representa una visión de construcción de un movimiento popular amplio para derrocar el régimen capitalista.
7. Visiones Divergentes en la UP: Se destacan las diferencias en la interpretación de los eventos entre líderes de partidos de la UP, como Luis Figueroa del PC y Carlos Altamirano del PS. Estas diferencias reflejan la compleja dinámica política y las tensiones dentro de la coalición de la UP.
El Plan Prats-Millas
Desde la propuesta del Plan Prats-Millas hasta su retiro a fines de febrero de 1973, se constituye un momento crucial en la historia de Chile, que marcó un enfrentamiento significativo entre el gobierno de la Unidad Popular (UP) liderado por Salvador Allende y los trabajadores organizados en los Cordones Industriales.
Este período fue testigo de la creciente conciencia y organización de la clase trabajadora en Chile, así como de su determinación para defender sus intereses y resistir cualquier intento de devolver el control de las empresas a los patrones. La movilización y el rechazo al Plan Prats-Millas reflejaron la lucha de clases en un momento crítico de la historia de Chile.
Puntos clave:
1. Plan Prats-Millas: El gobierno envió al Congreso el Plan Prats-Millas a fines de enero de 1973, que buscaba reducir de 91 a 49 las empresas consideradas estratégicas para el Área Social y establecer que éstas no serían expropiadas, sino indemnizadas a los patrones. Esto generó una fuerte oposición por parte de los trabajadores y los Cordones Industriales, ya que se percibió como un intento de devolver el control de las empresas a los patrones y una traición a los principios de la UP.
2. Rechazo al Plan y Movilizaciones: Ante la amenaza de devolver las empresas a manos privadas, los trabajadores se movilizaron activamente en contra del Plan Prats-Millas. Se organizaron barricadas, protestas y manifestaciones en varias partes de Santiago, con la participación de Cordones Industriales como Cerrillos-Maipú, Vicuña Mackenna, Ñuñoa, Macul y otros sindicatos.
3. Rechazo desde la Democracia Obrera: En este período, algunos Cordones comenzaron a aplicar métodos de democracia obrera, como la elección de delegados revocables mediante asambleas. Esto reflejaba el empoderamiento y la organización de la clase trabajadora en la gestión de las empresas y la toma de decisiones.
4. Movilización Multitudinaria: El 30 de enero de 1973, se llevó a cabo una masiva movilización frente a La Moneda en rechazo al Plan Millas. Participaron varios Cordones Industriales y sindicatos. Los manifestantes coreaban consignas como “Trabajadores al poder”. Salvador Allende prometió asistir a una asamblea de trabajadores para explicar su punto de vista, pero nunca lo hizo.
5. Retiro del Plan: A fines de febrero de 1973, el gobierno finalmente retiró el Plan Prats-Millas debido a la intensa presión y movilización de los trabajadores. Este retiro se consideró un triunfo para la clase trabajadora y un ejemplo de su capacidad para influir en la política gubernamental.
Mayo de 1973
El período desde la derrota del Plan Millas hasta los eventos de mayo de 1973, representa un período de creciente agitación y movilización social en Chile.
Puntos clave:
1. Huelga en el Cordón Huachipato: En abril de 1973, se desencadenó una huelga en el Cordón Huachipato de Concepción, en la que los trabajadores tomaron la pesquera Camanchaca. Esto fue un ejemplo de la creciente movilización de los trabajadores en diferentes sectores de la economía.
2. Huelga de Panificadores: En abril, los panificadores exigieron un aumento salarial del 100%, y el gobierno interviene en el conflicto, accediendo a las demandas de los panificadores. Sin embargo, la decisión de aumentar el precio del pan en un 100% generó tensiones y descontento.
3. Huelgas en el Cordón Vicuña Mackenna: En este período, las huelgas en el Cordón Vicuña Mackenna continuaron, con trabajadores de diferentes industrias, como Calzados Vittorino, Recauchados Chaler, Industria Maxwell y Muebles Galaz, exigiendo su traspaso al Área Social. Estos conflictos provocaron solidaridad y movilización en todo el Cordón.
4. Huelga Nacional en el Ministerio de Obras Públicas: El 24 de abril de 1973, más de 30,000 trabajadores del Ministerio de Obras Públicas iniciaron una huelga nacional por aumentos salariales. Esta huelga resultó en un acuerdo que cumplía la mayoría de las demandas de los trabajadores.
5. Protestas Estudiantiles y Marcha de la CUT: El 24 de mayo de 1973, se produjo una batalla campal en el centro de Santiago en protesta contra el rechazo de la Derecha a la aprobación de la Educación Nacional Unificada (ENU). Al mismo tiempo, la Central Única de Trabajadores (CUT) organizó una marcha en contra de la Derecha. Estos eventos reflejaron la creciente polarización y la confrontación política en Chile.
6. Integración de los Cordones en la CUT: El Partido Comunista (PC) y el ala más allendista del Partido Socialista (PS) promovieron la integración de los Cordones Industriales en la Central Única de Trabajadores (CUT). Esta estrategia tenía como objetivo canalizar y dirigir el poder de los Cordones desde la CUT. Sin embargo, esta integración generó tensiones y desafíos, ya que algunos trabajadores veían a la CUT como un intento de cooptación por parte de los partidos políticos. Si bien el MIR había estado a favor del control de los Cordones Industriales por la CUT, la radicalización de la clase obrera estaba influyendo en el cambio de esa política, lo que se consolida después del Taquetazo de julio.
7. Tensiones Políticas y Golpe Militar en Gestación: Durante mayo de 1973, las tensiones entre la Unidad Popular y la Democracia Cristiana (DC) se intensificaron, aumentando la confrontación entre las clases. Además, tanto civiles como militares estaban tramando una estrategia golpista en el país.
Empieza a generarse el doble poder en Chile
Los Cordones Industriales y otros movimientos de trabajadores y pobladores en Chile, estaban ganando fuerza y pasaron a buscar un mayor control sobre el proceso revolucionario desde mayo, en un proceso que se acentuó desde julio de 1973.
Puntos clave:
1. Radicalización de los Cordones: Después de la derrota del Plan Millas y el reflujo en marzo, los trabajadores en los Cordones comenzaron a desarrollar análisis propios y a expresar una mayor radicalidad en sus demandas. Comenzaron a cuestionar la falta de control obrero en la producción y la necesidad de que los trabajadores tuvieran un papel en la planificación económica.
2. Democratización de los Cordones: Hubo un proceso de democratización en el interior de los Cordones Industriales, lo que permitió una mayor participación de los trabajadores de base en la toma de decisiones. Esto generó tensiones dentro de la Unidad Popular (UP), ya que los trabajadores estaban tomando resoluciones por sí mismos.
3. Llamados a la Organización Popular: Líderes políticos, como Carlos Altamirano del Partido Socialista, reconocieron la importancia de la organización popular, incluyendo a los Cordones Industriales, los Comandos Comunales, y otros grupos. Esto se veía como una fuerza fundamental para la estabilidad del Gobierno Popular.
4. Paro Nacional de la CUT: La Central Única de Trabajadores (CUT) comenzó a funcionar como un medio para cooptar a los Cordones y canalizar su poder. Llamaron a un Paro Nacional en junio de 1973, con la consigna de “afianzar el mando y la autoridad del gobierno”. Sin embargo, muchos trabajadores estaban buscando ir más allá del gobierno y tomar un papel más activo en la dirección del proceso revolucionario.
5. Movilización de Trabajadores y Campesinos: La movilización de los trabajadores y campesinos se intensificó. Los trabajadores se unieron a los mineros de El Teniente en una manifestación y se formaron milicias obreras. Los campesinos también tomaron tierras y buscaron la solidaridad de los Cordones Industriales.
6. Presiones Políticas: Hubo presiones políticas tanto dentro como fuera de la UP. Algunos líderes políticos, como Hernán Ortega del Partido Socialista, presionaron para detener las movilizaciones, especialmente cuando las tomas afectaban a personas o sectores cercanos a la Democracia Cristiana (DC). Esto reflejaba la compleja dinámica política en juego.
El Paro Nacional de la CUT de junio de 1973
Puntos clave:
1. Paro Nacional de la CUT: El Paro Nacional convocado por la Central Única de Trabajadores (CUT) el 21 de junio de 1973 fue un éxito rotundo. Más de 700,000 personas se reunieron en el centro de Santiago, y aproximadamente 1,300,000 trabajadores participaron en la huelga. Esto refleja la creciente fuerza y unidad de la clase obrera chilena.
2. Demandas y Consignas: Durante el paro y las movilizaciones, se expresaron diversas demandas y consignas. Algunos trabajadores estaban dispuestos a negociar con la Democracia Cristiana (DC), como lo demuestra el cartel que menciona a Frei. Sin embargo, predominaron las consignas radicales que reflejaban la disposición de algunos sectores de la clase obrera a ir más allá de la UP y buscar el poder popular.
3. Comités de Vigilancia: Los Comités de Vigilancia en las industrias estaban alerta ante posibles ataques reaccionarios. Esto indica que los trabajadores estaban conscientes de las amenazas a su movimiento y estaban tomando medidas para proteger sus logros y sus luchas.
4. Estado de Emergencia: El hecho de que se declarara el Estado de Emergencia el 26 de junio de 1973, sugiere que las tensiones políticas y sociales estaban llegando a un punto crítico. Las fuerzas armadas comenzaban a prepararse para intervenir.
5. Llamados al Poder Popular: La consigna de “avanzar hacia la conquista del poder total” muestra que algunos sectores de la clase obrera estaban empezando a plantear la necesidad de un cambio más profundo en la sociedad chilena, y estaban dispuestos a luchar por ello.
El ensayo del golpe: el Tanquetazo de junio de 1973
El ensayo de golpe militar conocido como “El Tanquetazo” del 29 de junio de 1973 provocó el fortalecimiento del movimiento popular y dell gobierno de la UP, fortaleció la determinación de los trabajadores y aumentó su conciencia política.
Los problemas generados fueron la falta de fuerza del movimiento popular para enfrentar el golpe, principalmente por las políticas de la Unidad Popular de defender la institucionalidad burguesa a cualquier costo, como por ejemplo con la Ley de Armas o la introducción de militares en el gobierno o los varios intentos de acuerdos con la Democracia Cristiana, mientras el imperialismo, la derecha y las clases dominantes preparaban a todo vapor el golpe gorila.
Puntos clave:
1. Cordón Industrial Cerrillos-Maipú: Los trabajadores de este Cordón expresaron que el intento de golpe solo había fortalecido su determinación y conciencia. Vieron a los patrones y a los sectores reaccionarios como una amenaza real y estaban dispuestos a organizarse mejor para defender sus intereses.
2. Respuesta Campesina: Los campesinos también reaccionaron rápidamente ante el intento de golpe. Organizaron la toma de fundos y cortaron el suministro de alimentos a los intermediarios. Esto demuestra la solidaridad y la capacidad de organización de los campesinos en ese momento.
3. Coordinación con los Partidos Políticos: El PS de Allende y el PC comenzaron a trabajar más estrechamente con los Cordones en tareas de organización. Se formó un Comando Central y se coordinaron sindicatos, pobladores y campesinos. Se crearon Comités de Vigilancia y Brigadas de Defensa.
4. Ocupación de Fábricas: En varios Cordones, como Vicuña Mackenna, se tomaron todas las empresas del área. Los trabajadores organizaron barricadas y bloqueos de caminos como parte de su respuesta al intento de golpe.
5. Desconfianza hacia los Militares: A pesar de que algunas fuerzas militares defendieron al gobierno durante “El Tanquetazo”, muchos trabajadores mantenían una desconfianza profunda hacia los militares y creían que su lealtad estaba con la burguesía y no con la clase trabajadora.
6. Manifestaciones Masivas: Se llevaron a cabo grandes manifestaciones en la Plaza de la Constitución, con la participación de los Cordones y sus consignas, como “Mano dura, Presidente”. Las mujeres también se unieron a estas manifestaciones junto a sus compañeros de clase.
La disputa por la dirección de los cordones industriales
Las sucesivas capitulaciones del gobierno de la Unidad Popular y la falta de una estrategia unificada para la toma del poder contribuyeron a la debilidad del gobierno y, finalmente, a la capacidad de la oposición de derecha y las Fuerzas Armadas para llevar a cabo el golpe militar que derrocó a Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973, orquestado por el imperialismo norteamericano.
Puntos clave:
1. Divergencias en los objetivos de los Cordones: Una de las principales diferencias en los Cordones Industriales radicaba en si el enfoque debía estar en las demandas reivindicativas inmediatas o en la cuestión del poder. El PC y el ala Allendista del PS buscaban que los Cordones se integraran a la CUT y apoyaran al gobierno de Allende. El MIR estaba de acuerdo con esa política desde que la CUT fuera democratizada y los Comandos Comunales fortalecidos. Mientras tanto, algunos Cordones llegaron a levantar la política de que la CUT debía subordinarse a ellos, dado que eran órganos más avanzados.
2. El papel de los Cordones Industriales: Los Cordones se habían convertido en poderosas organizaciones populares, y algunos consideraban que debían asumir un papel central en la toma del poder. Esta perspectiva estaba en línea con la idea de que los Cordones eran órganos de poder real y dual en contraposición a la CUT, que era vista como una central sindical y controlada por una dirección burocrática.
3. Crisis en el gobierno de la UP: El gobierno de la UP estaba enfrentando una creciente crisis y presión por parte de la oposición de derecha y de las Fuerzas Armadas, lo que aumentaba las dudas y desmoralización.
El ocaso y liquidación de los Cordones Industriales
A pesar del período de auge que hubo en la movilización y la organización de los Cordones, especialmente después de “El Tanquetazo” de julio, la falta de un liderazgo unificado y de una estrategia clara -lo que era provocado por las políticas de la propia Unidad Popular- llevaron a un retroceso en agosto de 1973, momento en el que el golpe militar se vislumbraba cada vez más cerca.
Con la caída del gobierno de Salvador Allende en Chile el 11 de septiembre de 1973, los Cordones Industriales fueron duramente golpeados y liquidados.
Es importante destacar que los Cordones Industriales representaron un experimento único en la historia del movimiento obrero, donde los trabajadores asumieron un papel protagónico en la gestión de las fábricas y la toma de decisiones sobre la producción. También refleja los desafíos y las tensiones dentro de la coalición de la Unidad Popular y la falta de un partido revolucionario sólido que pudiera liderar una transformación más profunda.
A pesar de la derrota de los Cordones y la Unidad Popular, su legado perdura como un ejemplo de la capacidad de la clase trabajadora para organizarse y luchar por sus derechos y por la transformación social.
El reducido tiempo de vida de los Comandos Comunales, como del propio MIR, impidieron su posterior desarrollo como órganos de poder obrero, que era el principal pánico que tenía la burguesía.
El MIR tampoco tuvo tiempo para desarrollar su política en el seno de la clase obrera, que en lo fundamental era controlada por los partidos Socialista y Comunista, y que tendían a desarrollarse como consejos de trabajadores de tipo soviético, como base de la dirección del poder popular revolucionario.
Eso empezó a cambiar después del Tanquetazo de julio de 1973, como un ensayo del golpe gorila de septiembre, que tuvo como política principal golpear con mucha fuerza al movimiento obrero y al movimiento de masas, aislarlo de las organizaciones revolucionarias, para liquidarlos.