Por Alejandro Mora Donoso
No sólo el golpe es estructural, el pueblo peruano está siendo brutalmente asesinado en la calle, suprimiendo con miedo sus demandas, así es como la ultraderecha peruana quiere seguir sosteniendo la constitución fujimorista de 1993 vía Boluarte es una paria en Latinoamérica y nuestro gobierno, en Chile, debe tenerlo muy claro, durante el gobierno de Boluarte Edgard Prado Arango recibió el impacto de dos proyectiles de armas de guerra.
Dentro de su cuerpo se halló un proyectil “para cartucho de Fusil HK, GALIL, calibre 5,56 mm y/o 223” de 1,6 cm x 1,1 cm. de eje mayor por eje menor, y el otro de calibre 9 mm Ojival”, según el Informe Pericial Balística Forense emitido por la Dirección de Criminalística de la misma Policía Naciona, esto podría inferir un delito de extrema gravedad.
Entonces mientras que los muertos se cuentan por decenas es imposible tener respeto por un gobierno que no ha respondido a ninguna demanda de su gente, hoy el foco está sin lugar a duda en la estabilidad para los pueblos de nuestra golpeada América, la respuesta tibia de los sectores nacionales hacen aún más delicada la situación, hoy solidarizar con el pueblo peruano es una cuestión moral que no es fácil para el mundo político, cuestiones fronterizas e intereses económicos no pueden estar por sobre ello.
No somos una isla en medio del Pacífico, y tampoco una colonia extranjera en medio de un continente ajeno, la lucha de peruanos hoy también es nuestra, la lucha de ecuatorianos y colombianos también es nuestra, Las izquierdas tenemos sentido de pueblos hermanos y los gobernantes deben intentar ver esa visión.
La reacción internacional contra la responsabilidad política de Boluarte se debe hacer sentir, ella tiene responsabilidad política en esta masacre a su pueblo, la necesidad de una justicia real, reparación y garantías de no repetición es algo que chile debe establecer como parámetros éticos de relaciones internacionales, aunque nuestro país esa construcción no exista a cabalidad, entonces hoy debemos estar quienes entendemos que la América de Bolívar y Allende es necesaria para la libertad de los pueblos y naciones de algo que no es una utopía, esa América grande debe ser una realidad.
¡Fuerza Perú!
